domingo, 20 de enero de 2008

felicidades


Cómo pasa el tiempo... otro año más.

La de horas que pasamos haciendo planes, pensando qué sería de nosotros, de nuestra vida cuando llegáramos a esta edad. Era divertido imaginar una existencia totalmente opuesta a la que veíamos que llevaban todos alrededor; aquello no era para nosotros. Lo mejor de todo es, que siempre, cualquiera que fuese la aventura formaría parte de tu vida y de la mía.
Acostumbrábamos a compartir todo, no había reparos ni temor a hacer o decir nada. Sabíamos que el otro sólo era una prolongación de nosotros mismos. Los deseos, los sueños también entraban ahí, como si al ser compartidos fuesen más fáciles de llevar a cabo. Eran muchas las ideas, algunas sin sentido, pero a fin de cuentas eso es lo que marca la diferencia.
Con el tiempo hubo algunos cambios, los estudios, los nuevos amigos, los amores... pero siempre había tiempo y ganas de pasarlo juntos. Nada podía evitar la presencia, la complicidad.
Es increíble como pasa el tiempo, eh? vas a cumplir otro más y no hay nada más triste que el que no estés para celebrarlo contigo. Incumpliste tu parte del trato, te fuiste antes de que hiciéramos tantas cosas... ya sé, ya sé que no lo planeaste. No lo elegiste, sucedió, sin más. Pero en ocasiones, no puedo evitar enfadarme contigo, porque te extraño, te echo tanto de menos...

Dicen que el haber dicho lo que se supone que debías decir, haber hecho lo que se supone debías hacer ayuda en estos casos. Pero son varios los meses en los que te hablo sin que respondas, mucho tiempo sin ver esos ojos que sonreían siempre, daba igual la situación, nada borraba ese gesto y esas ganas de sacarle a todo el mejor partido.
Ahora sólo unas fotos me miran. Me dicen que estabas aquí, que en ocasiones no hay que desear nada más que lo que se posee, que es cierto que disfrutar el momento es lo único que tiene sentido, que el futuro es incierto y que la ausencia, en algunos casos, demasiado larga.

Hoy, de estar tú aquí, todo sería diferente. Seguro que sería un día especial, habría que celebrar tu presencia, un año más de tu vida, habría besos, abrazos, risas...

Guardo los que recibí durante el tiempo que pasaste conmigo. Eran, sin yo saberlo entonces, el mejor recuerdo que me dejarías.