domingo, 10 de febrero de 2008

The Jesus and Mary Chain








Los primeros conciertos de The Jesus and Mary Chain se han convertido en legendarios en los círculos independientes. Sus cortas actuaciones, algunas de no más de diez minutos, consistían en una constante muralla de distorsión y ecos. Tocaban de espaldas al público, no por una actitud de desprecio sino por una táctica asumida.
El grupo impactó por varias razones: un sonido potente y distorsionado, letras agresivas y una característica actitud de "a-la-mierda-con-todo", postulado que incluía a sus fans. Sus actuaciones siempre solían terminar con la destrucción del intrumental y con disturbios.

Comenzaron en 1984 sin tener ningún conocimiento musical, con un primitivo acercamiento a la música, sensorial y corporal más que técnico. En su segundo LP (Darklands) se aprecia un sonido más melódico, más armonioso.
Automatic (1989) supone un alejamiento de la violencia que predominaba en sus comienzos. En 1992 con Honey's Dead, retoman la irreverencia de los primeros años y prohíben algunas de sus canciones en radio y televisión. En su quinto album retoman una dirección más acústica, como ya sucediera con el segundo. Después de cuatro años sin grabar, en 1998, reaparecen con Munki. Este disco no dio el resultado esperado, aparece como un refrito del al antigua fórmula mágica, hecha y deshecha...
A principios de 1999 se produce el anuncio oficial de la disolución de la banda. Sus relaciones son conflictivas, así como sus vidas rodeadas de escándalos, detenciones y problemas de drogas y alcohol.

Ahora dicen que vuelven a grabar, supondría el regreso de una de las bandas míticas y más importantes del underground. Habrá que esperar a la primavera para escuchar como resulta el evolucionado sonido Mary Chain.



Just like honey / The Jesus and Mary Chain